jueves, 3 de noviembre de 2011

Tengo...


Tengo las preguntas abiertas
Y de las retóricas también,
Tengo ganas de decirlo todo
Y de callarlo también.
Dolor en las amígdalas
Por no poder decir,
Dolor en las plantas de los pies
Por no poder correr.
Tengo febriles antojos
De un sueño fresco
Y algo nauseabundo.
Tengo mil fantasías en un cajón
Y un sueño cansado de ser soñado.

Quisiera abrir de par en par
La puerta de mis locuras
Y atesorar en mi pecho
Recuerdos dignos de memoria.

Tengo un nombre atravesado en mis labios,
Tengo un libro que jamás leí
Y el furtivo anhelo
De siempre partir.
Tengo ganas de destruir la noche
Como si fuera de cartón pintado
Y subir al cielo y cantarle a luna
Las más bellas canciones de cuna.

Quiero abrirme a las delicias del camino
Alejarme por siempre
De lo que no me merece,
Ser yo y ser todos,
Partir por partir
Parirme de nuevo.

Tengo un don alojado en mi pecho,
Tengo un llamado
Al que nadie acude,
Tengo una lágrima que se desliza
Siempre hacia abajo.

Quiero poder jugar con el todo
Sin tener que quedarme sin nada,
Y que no me apresure el alba
Ni me pese la conciencia
Cuando anhele anhelar.

Tengo miedo de que sea tarde,
Tengo miedo de no escuchar
Las palabras soñadas,
Tengo miedo de que no tengas el valor
Para correr al encuentro
De nuestro mayor verdor.

Quiero que sientas los que digas,
Que los sientas de verdad,
Que una noche de jueves,
Así porque sí,
Se te  aclaren todas las ideas
Y retires los cargos contra mí.
Quiero ya no soñar con lo imposible
Y que sólo por hoy
Todo sea posible.





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