viernes, 18 de febrero de 2011

Poema pre finde.


Los tipos más pendejos
Pasaron por mi cama,
Recibí propuestas indecentes
Entre mares de vísceras.
Empapada en alcohol
Me prometieron el cielo y la luna.
Me pidieron las estrellas
Pero nunca dieron las gracias.
 En un pucho me fumé la vida,
Me arranqué el traje en baños mudos
De estación de tren,
Entre autos estacionados
Abandoné el pudor,
Contra un muro silencioso
Hice desmanes a la luz de la luna.
 Sopesé la vida
Entre cartas de Tarot,
Aposté la última ficha
Sin saber que ya estaba perdida
Ésa y todas las partidas.
 En una canción confundí
Mis sueños de juventud.
Miré los ojos de mi pena
Y ataqué
Mas de nada me beneficié.
Caminos polvorientos
Han sucumbido ante mis pasos,
En esquinas rotas
Dirimí la última gota de inocencia.
Ataqué por la espalda a la vida
Y ella me respondió peor.
 Con letra de fuego
La historia de mis días,
Con el puño acierto
Con el pensamiento erro.
En cuchitriles de mala muerte
Mancillé cualquier cosa parecida al amor,
Y así, vagabunda errante
Me juré eterna poseedora
De todas las poesías.
 Besos anónimos,
Lunas robadas,
Vino derramado,
Humo viejo enviciándolo todo.
Memorias en el diván, sábanas sucias,
Recuerdos de alquitrán,
Callos en los dedos de tanto mendigar.
A dónde se fue el tiempo de la algarabía,
A dónde lo jocoso que se oculta en lo profano,
A dónde la miel exacta que recorría,
A la vez que colmaba, todas mis pasiones?
En virtud de lo dicho y hecho
Deberé declararme culpable.
He fallado, soy sólo una mortal,
Mas no me excuso,
Acato mis nuevas cadenas,
No obstante el tiempo será
El que marque mi condena.
 Yo vengo del fango
Y hacia él voy
Atada y de rodillas,
Vencida ya por los vaivenes de la historia.
No pido eximición de culpas.
No pido redimirme de ningún modo,
Pido cadena perpetua
Para mí y mis llagas,
Para mí y mis circunstancias,
Para mí y mis palabras.
Allá en la tragedia universal
Yo quiero escribir para siempre.
Siempre dominada por mi yugo,
Anclada en el instante mismo
En que nace la poesía.

24/11/10.

miércoles, 9 de febrero de 2011


Dile poesía al mundo
Quién soy yo.
Dile que amo tu esencia
Y que la persigo con dulce armonía.
Dile que río toda la noche
Y lloro al llegar el día.
Que callo tempestades feroces
Como el océano más bravío.
Dile que llevo tenebrosos secretos
Que lastiman de ser escuchados.
Y que mi pecho guarda soledades
Que coseché luego de los malos años.
 Dile poesía al mundo
Que me visto de primavera
Y me hechizo con su magia.
Dile que acudo fatídicamente
A los llamados mundanos
Y que recelo de las bonitas flores.
Dile que tengo como guía
A mi sacro orgullo
Y que él templa mis días.
Dile cuán cansada estoy ya de lidiar
Y que a la esperanza
La llevo remilgada, atada al corazón.
Que soy mucho más de lo que se ve
Y que acarreo tempranas convicciones
De un cuento mal contado.
 Dile poesía al mundo
Que atesoro fragancias de abril
Y que de la monotonía
Soy trágica esclava.
Dile que ansío llegar
Al firmamento de a dos.
Dile que tras cada ocaso
Muero un poco
Y que gusto de la buena compañía.
 Dile poesía al mundo
Que de tinieblas se llenó mi pecho
Y que ahora por lúgubre y seco peca.
Dile que no soy lo que ven,
Que siempre falta un poco más.
Dile que mi libertad
Es el motor que impulsa
A mis venas y a mis pasos.
Que sueño cada estío con la felicidad
Y que la abraso con el fuego de la osadía.
 Dile poesía al mundo
Que de amor carezco
Pero que a él le dedico
Mi verso mejor.
Dile que vivo del otro lado de la luna
Y acicalo mis arterias
Para cada festín.
Dile que en el fondo
Soy una niña asustada
Llena de fantasmas y odios
Que pierde su templanza y cordura
En el trágico mecer de los brazos de Baco.
Y dile al fin
Que hoy como ciega
Salgo detrás de mi destino.
Que por mi libertad me desangro
Y que por ella muero
Y que por ella mato.