martes, 27 de diciembre de 2011

Vade retro!


Vete con tus vanidades
guardadas en algún cofre,
que yo para mí sólo guardo las desgracias
que se desgraciaron en algún mal paso.
 No tengo ya más motivos
todo está cautivo y preso de la memoria,
no tientes a las palabras
ellas saben más que yo
y degradan con su peso todo a su paso.
 Vete y no rejuntes los despojos de la historia
que siempre habrá un siempre para el error
y nada ya quiero arrancar del corazón.
 No perturbes mi calma temprana
que rehuyo de las malas omisiones
y los secretos se aprietan en mi garganta,
yo ruego para que no se liberen.
 Vete con tus desórdenes mentales
a la otra habitación,
no medites tu hipocresía
ni vaciles si vas a dispararme o no
que no hay peor compañía que la cobardía.
 No me apuntes sino vas a gatillar,
destrózame de una buena vez
y luego aléjate ponderando soberanía.
Retroceden tus mares
ante mi prepotente osadía.
 Vete con tus armas a otro lado
sino vas a usarlas,
si quieres, fulmíname con una mirada
que yo para ti guardo
¡todas! todas las palabras que desarmo.




(de antaño...)


4 comentarios:

  1. Tu poema es un rezo a las palabras malditas.. Me gusta
    Abrazos y felicidades!

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  2. gi: nunca pensé que te diría ésto pero....lo que acabo de leer pide a gritos un arreglo instrumental. te juro que es un tango!! el carácter, la entonación, la frescura,la decepción de quien se queja y la duración exactas. qué personaje sos. no es imposible.ojalá lo consideres.qué mina talentosa.

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  3. Hay que tener un don para tratar a las palabras, como si fuesen mujeres, conocer sus gustos, sus caprichos, sus debilidades ... parecer que se baila un tango con ellas
    ... parece gustarles y las dominas ...

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  4. Gracias por las bellas palabras que me dejan...
    Kafkiano: siempre quise que alguno de mis poemas lleven música, son como una cuenta pendiente...

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