martes, 13 de octubre de 2009

Quiero no estar.





No te percatas, acaso,
De la virulencia de mis palabras,
No te ofenden, siquiera,
Mis versos?
Mira el punto aciago que lograste,
Mira el paupérrimo infortunio
En el que imperaste.
Funesta y degradante tu vida,
Deja a los felices en paz
Y vete a tu infierno,
Que en su umbral te esperaré
Con un ramo de no me olvides
Y sal para las llagas.
Sin el báculo de tu séquito
Algún día te quedarás
Y tu sangre infecta arrojará
La plaga de mis palabras.
Y éstas como oprobio
Te alimentarán.
Tu santísimo trono
En mil se romperá
Y una luz, al fin,
Se divisará,
Me hiciste suprema
De esta pesadilla taciturna.
Te devuelvo tus armas,
De tu juego declino,
No tengo más motivos
Para seguir tu trino.
Apaga el sol
Que éste ya no calienta más.








A veces, sólo a veces quisiera no estar.
A veces quisiera detener el mundo y bajarme...
A veces no entiendo a nadie.
A veces me pierdo.
Pero pierdo
y eso sí es seguro,
si TE MIRO.





2 comentarios:

  1. a veces me pregunto como lo haces? debe ser algo nato

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  2. Es muy bueno tu poema y habla de cosas que me son muy afines.
    Yo suelo debatirme en el amor la vida y la tentación de no ser.

    Pasaba también a invitarte a la presentación de mi nuevo libro. Si querés y tenés tiempo venite. Te paso los datos:

    Presentación de En la orilla de Máximo Ballester
    Ediciones El Mono Armado
    el sábado 24 de octubre a las 18
    En el SadeM
    Av. Belgrano 3655
    Charla y lectura con Sebastián Barrasa de Cruzagramas y también Sebastián con Emilse Mancebo en show musical.

    Que estés muy bien.
    Un abrazo.

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