Necesito muchas cosas,
Cosas que cualquier ser humano necesitaría...
Necesito un oído que me escuche,
una palabra de aliento,
un abrazo cálido a tiempo,
tiempo para estar sola.
Necesito una esperanza,
necesito creer que sí se puede,
necesito hojas al viento,
necesito hablarte, incluso, con el pensamiento.
Necesito que me recuerdes,
que juguemos a las palabras,
que me acaricies con la mirada,
que me hables de tu mundo,
que me invites a recorrerlo.
Necesito, entre otras cosas,
que me lleves a perderme
para luego encontrarme
y que sea a tu lado,
que juguemos limpiamente
al gato y al ratón,
que apagues mis incendios
e inundes mis pasiones.
Necesito reconocer en tus gestos
el exacto que me provoque
querer siempre un poco más.
Necesito que me enseñes
todo aquello que no sé,
que me señales el cielo
y me muestres las estrellas
y al contemplarte se reflejen
todas ellas
en tus ojos mirándome.
Necesito demostrarte
el peso astral que en mí se deposita,
que puedo ser yo quien de la mano
al firmamento te conduzca.
Que me busques y me encuentres
y que sin querer lleguemos a vernos
y entonces nunca olvidemos
esa mirada que nos responde.
Necesito entre tantas cosas
que no me pierdas de vista,
saber tus lugares,
saber dónde te hallo en esta ciudad tan
grande,
saber cómo haces el camino,
al lado de quién y hacia dónde.
Necesito muchas cosas,
pero ante todo necesito un milagro...
14/04/09.
Título: "Toda la noche en la calle", Amaral.
Y ese milagro lo conseguirás, porque cuando se necesita y se propone dar tanto es señal de que se busca con todo el Alma la seguridad de Encontrar.
ResponderEliminarUn abrazo, Gisela.
te regalo unas gotas de olvido, de bálsamo cicatrizante para el corazón, litros de esperanza, kilos de superación, horas de amnesia y por supuesto un nuevo amor...
ResponderEliminarsiempre se puede y aunque suene majadero todo pasa, va llegar el momento en que esta etapa se transforme en un mal recuerdo.
salud y esperanza!!!